La medianoche del pasado día 3 de noviembre se dio el pistoletazo de salida a la campaña electoral que concluirá con la celebración de las elecciones generales del próximo día 20 de este mismo mes. Lo primero que llama la atención es que si la campaña electoral ha comenzado hace unos días, ¿qué se supone que era todo lo que hemos estado viviendo y aguantando en los últimos meses? Porque, menos gobernar los unos y ejercer la oposición los otros, nuestros mal llamados padres de la patria llevan instalados en la refriega política desde hace, por lo menos, dos años. Tampoco tengo ninguna duda sobre que, tras los resultados del 20N, el día 21 de noviembre comenzará la campaña electoral para las elecciones generales previstas para el 2015.
Uno de los actos centrales y más esperados será el debate televisado que el día 7 enfrentará a Rubalcaba y a Rajoy, los dos principales candidatos a conseguir la Presidencia del Gobierno. Según informaciones aparecidas en las últimas horas, el coste de dicho debate ascenderá a más de medio millón de euros, lo que ya ha provocado la aparición de las primeras voces discordantes, canalizadas sobre todo a través de las redes sociales. Y es que, realmente, se nos plantean varias preguntas: ¿qué porcentaje de voto se decidirá tras la celebración de este debate? ¿y después de toda la campaña electoral, con todo el gasto que acarrea? ¿tiene sentido afrontar el disparatado coste económico de algo que puede que no tenga mucha incidencia en la decisión de los votantes?
Por lo menos, esperemos que todas las fuerzas políticas se centren en debatir sobre los problemas que realmente preocupan a los ciudadanos. En estos momentos los temas principales son, sin ninguna duda, el paro y la crisis económica, pero entendida ésta como las dificultades que tienen la mayoría de las familias para llegar a fin de mes. Hago esta matización porque la semana pasada en la reunión del G-20 se habló de la crisis, pero desde el punto de vista de salvar y acudir al rescate de los grandes bancos y de las bolsas, es decir, de los llamados “mercados financieros”, que nadie sabe realmente lo que son, pero que, en definitiva, son quienes nos mangonean y nos han llevado a esta situación. Pero no se les ha escuchado ni una palabra en favor del cuidadanito de a pie, que no sabe cuánto tiempo más podrá seguir aguantando esta dura situación.
Querido lectores, estamos en plena campaña electoral; aunque nos lo propongamos, tendremos difícil abstraernos a ella, así es que os animo a seguirla, a participar y a debatir, y os invito a que, ante una copa con dos cubitos, manifestéis vuestras opiniones a través de este foro.